Objetivo: la protección de sus vínculos familiares
Una reclamación de paternidad y filiación es un proceso delicado donde se establecerá o no la relación paterno-filial mediante una sentencia judicial. Soy Marisol Martínez Izquierdo, abogada especializada en reclamación de paternidad y filiación en Orihuela y resto de la provincia de Alicante.
Especialistas en derecho de familia en Orihuela
Abogada con más de 20 años de experiencia en reclamaciones de paternidad y filiación. Le proporcionaré el asesoramiento y orientación jurídica necesaria, agilizando los trámites legales y evitando posibles errores.
Reclamación de paternidad y filiación
En el proceso de reclamación de paternidad, buscamos establecer la relación paterno-filial a través de una sentencia judicial. Para las reclamaciones de filiación, es esencial considerar la «posesión de estado», donde el progenitor y el hijo se tratan mutuamente como tal, siendo reconocidos por amigos y familiares, incluso utilizando el apellido del progenitor. Dependiendo de la posesión de estado, los requisitos y las personas que pueden reclamar la filiación varían.
Despacho experto y enfocado sólo en derecho de familia. Encontraré la solución.
Si existe posesión de estado, cualquier persona con interés legítimo puede reclamar la filiación.
En ausencia de posesión de estado, las reclamaciones pueden ser matrimoniales o extramatrimoniales, con plazos específicos para solicitarlas.
Efectos de la filiación reconocida
El reconocimiento de la filiación puede tener diversos efectos, como acuerdos sobre la pensión alimenticia, reclamación retroactiva de la pensión alimenticia y reconocimiento forzoso como heredero.
Especialistas en derecho de familia en Orihuela
Hijos de relaciones esporádicas que buscan reconocimiento paterno.
Madres que decidieron asumir solas la maternidad, pero han cambiado de opinión.
Padres que desconocían la existencia de un hijo.
Familias que buscan reconocimiento de derechos sucesorios.
Plazo y procedimiento para reclamar la paternidad y filiación
El proceso en España se inicia mediante un juicio verbal. Tras la admisión de la demanda, el Ministerio Fiscal y las partes involucradas tienen 20 días para responder. Posteriormente, se celebra una vista donde se presentan pruebas y conclusiones orales. Parece un proceso sencillo, pero las interioridades del mismo y las relaciones familiares hacen de este un proceso más que complicado.